Entre cortijos y bodas

Ayer di una voltiña con Javier, que siempre dice que estoy muy perdío y que es más fácil aprobar unas oposiciones que quedar conmigo. Más tarde se nos unió jesús.

Me estuvieron enseñando las fotos del cortijo que se han comprado para meterse de lleno los fines de semana en el mundo agrorural. Cada vez que veía una foto de la casa me daba un vuelco el corazón, pues todavía tiene la decoración de los antiguos dueños y está todo como muy lleno de santos, fotos familiares, paños de croché... incluso salía en las fotos una cama con unas sábanas del oso yogui y en el cabecero la virgen con el niño. Que miedo más grande. Que intranquilidad. Lo más raro es que fuera de la casa tienen una cabañita con una cama puesta en vertical, y claro, ya empecé a inventarme historias de lo que ha pasado en ese cortijo... llegué a la conclusión de que en la cabaña tenían escodido al hijo deforme, atado a la cama vertical. Ummm... y tiene justo delante una zona de cesped muy sospechosa... seguro que hay cadáveres enterrados. Total, que al final se enfadaron un poco, pero es que soy mu fantasioso.

Luego nos pusimos a inventarnos el nombre que le iban a poner al cortijo. Los que tenían más fuerza eran "Valhalla" y "Xanadú", pero al final ganó "Villamoña".

También me dieron la invitación de boda, se casan a finales de septiembre en Avilés. Mi churri y yo nos pediremos un día en el trabajo he iremos cuatro días a Oviedo, unas minis vacaciones. Después de la boda, que mejor forma de celebrarlo que hacer una espicha (juerga en bodega pa jalarnos un tonel de sidra... hip!!)

En fins, me despido ya hoy poniendo un link cultural... sabíais que las primeras apariciones artísticas de Enrique Bumburi fue sustituyendo a un miembro del grupo parchis???